Niños y Niñas inmunosuprimidos y coronavirus
Los niños que están inmunocomprometidos y los niños con afecciones médicas crónicas pueden tener un mayor riesgo de desarrollar cuadros infecciosos y complicaciones.
Si el niño tiene:
- trasplante de órgano sólido (es decir, corazón, riñón, pulmón, hígado, intestino)
- trasplante de médula ósea
- cáncer
- inmunodeficiencia congénita o primaria
- VIH / SIDA
- enfermedad reumatológica
- enfermedad gastrointestinal
- otro tipo de afecciones médicas crónicas
- los que se encuentran tomando corticoides a largo plazo o inmunomoduladores selectivos (es decir, agentes anti-TNF, azatioprina, MMF y todos los agentes inmunosupresores)
puede pertenecer el grupo de niños con mayor riesgo, por eso es muy importante que practiques siempre buenos hábitos de higiene.
Si bien la enfermedad grave parece ser más frecuente en los adultos, aún no sabemos con certeza si los niños que presentan una enfermedad crónica o aquellos que se encuentran en algunas de las situaciones referidas arriba tienen un mayor riesgo de infectarse o de una enfermedad grave por COVID-19, pero parece probable que esto sea así.
Como padre, madre, o guardián de un niño o adolescente con factores de riesgos, tenés que tomar precauciones adicionales para evitar la posibilidad de contagio con COVID-19 o la transmisión a otros.
Es importante cumplir el aislamiento social:
- Mantené siempre una distancia de al menos 1 metro y medio entre el niño y las demás personas de la casa, evitando besos, abrazos o saludos de manos.
- No permitas en este período las visitas en tu domicilio.
- Evitá, de ser posible, el transporte público si deben concurrir al hospital.
Cumplí con todas las medidas de higiene habituales:
- Lavá tus manos y las del niño con frecuencia (al menos una vez por hora con agua y jabón por al menos 20 segundos cada vez). Esto incluye mientras estén en casa.
- No deben tocarse ojos, nariz o boca.
- Limpiá las superficies de teléfonos, teclados, manijas de puerta, interruptores de luz y superficies de muebles con toallitas o limpiadores domésticos al menos una vez al día.
- No dejes que el niño comparta artículos del hogar (como tazas y toallas) con otras personas.
El tratamiento continuará según lo planeado a excepción de aquellos casos en que el equipo tratante te avise lo contrario. No suspendas ningún tratamiento sin consultar con el pediatra de cabecera.
Tu forma de controlar la fiebre no debe cambiar. Si el niño tiene fiebre, debés seguir las instrucciones habituales que recibiste del equipo que los atiende.
Debes venir al hospital de inmediato si el niño tiene alguno de los siguientes síntomas:
- Respiración rápida o dificultad para respirar
- Color de piel azulado
- No bebe suficientes líquidos
- No se despierta o no se relaciona como lo hace habitualmente
- Está tan irritable que no quiere que lo carguen
- Tiene fiebre con sarpullido
Si tu hijo o hija presenta síntomas de COVID-19 (fiebre, tos, sensación de falta de aire o malestar general), comunicate a los siguientes teléfonos:
0800-222-1002 Salud Responde;
148, Provincia de Buenos Aires;
107 / 11 5050 0147 (whatsapp), Ciudad Autónoma de Buenos Aires.