El evento, realizado en el patio del Centro de Atención Integral del Paciente Hemato-Oncológico (CAIPHO), buscó dar un mensaje de vida y esperanza, visibilizar la temática y fomentar su detección temprana.
Directivos, jefes de servicio, y personal del Garrahan junto a la Fundación Pediátrica Argentina plantaron un árbol en el patio del CAIPHO en conmemoración del Día Internacional de Cáncer Infantil, que se celebró el 15 de febrero.
La actividad contó con la presencia de Guillermo Gonzalez Prieto, presidente del Consejo de Administración, Aldo Haimovich, consejero del Hospital, Ana Brulc, directora de Atención al Paciente, Lidia Fraquelli, coordinadora del CAIPHO y Pedro Zubizarreta, jefe del servicio de Hematología y Oncología. Daniel Scheifer y Elvis Negrete encabezaron el evento por parte de FuPeA junto a otros voluntarios.
Los presentes colaboraron en la plantación de un fresno rojo con una palada de tierra y se coronó el evento en el riego del árbol por parte de varios niños y niñas que se atienden en el hospital.
“Es importante seguir trabajando todos juntos y en red con los distintos centros pediátricos para lograr la mejor atención oncológica posible en todos los niños y niñas del país, y así lograr una verdadera equidad en el acceso al tratamiento”, expresó Zubizarreta.
Por su parte, Daniel Scheifer, destacó que, desde FuPeA, buscan “concientizar sobre una detección y tratamiento tempranos e igualitarios para todos los niños y niñas”. Negrete agregó que desde la organización “apoyan todos los proyectos que mejoren la calidad de vida de los pacientes”.
El cáncer infantil es una enfermedad que afortunadamente es poco frecuente y es curable. Se cura en la mayoría de los casos, atendidos en tiempo y forma adecuadamente, alrededor del 70% u 80%. Esta enfermedad afecta en nuestro país a 1340 niñas y niños por año. De esa cifra, el 80% son atendidos en hospitales públicos y cerca del 40% es atendido en el Hospital Garrahan, lo que significa unos 500 nuevos casos por año para la institución pediátrica. Si bien la sobrevida del cáncer en la población pediátrica es alta, la detección temprana es fundamental.