En el Garrahan se desempeñan con gran profesionalismo y dedicación cerca de 100 bioquímicas y bioquímicos distribuidos en los 14 laboratorios del Hospital. Su trabajo es fundamental en la prevención, diagnóstico, pronóstico y tratamiento de las enfermedades, y en la investigación y desarrollo científico. Atienden a 900 pacientes por día, y validan alrededor de 2.000.000 de determinaciones por año.
Además, desde el inicio de la pandemia la intervención del bioquímico cobró relevancia porque brinda la información necesaria para el diagnóstico de Covid-19, tanto en muestras de pacientes como del personal, y no solo para descartar o confirmar la infección, también sobre los biomarcadores que orientan sobre el pronóstico de esta enfermedad.
Stella Carchio, coordinadora de Laboratorios, explicó que los continuos cambios los obligan a adquirir nuevas competencias, a trabajar en equipo, a fortalecer la comunicación interna y la interdisciplina. “El bioquímico clínico es un actor fundamental dentro del ecosistema de salud, coloca al paciente como centro de la atención, y está integrado al equipo. Estamos orgullosos de, a pesar de todo, poder sostener los requisitos que exige la norma IRAM ISO 15189, que se reflejan en la calidad de la información que brindamos y en nuestros indicadores”, destacó Carchio.
"Los laboratorios modernos adaptados a los nuevos paradigmas necesitan de bioquímicos clínicos que reúnan determinadas características: flexibles y adaptables al cambio, líderes potenciales de la eficiencia, asesores en la elección e interpretación de nuevas pruebas diagnósticas, facilitadores de la calidad y seguridad e integrantes de equipos interdisciplinarios, donde las inteligencias se suman, se potencian, con el único objetivo de construir un conocimiento más grande, superador", concluyó Carchio.
El Día del Bioquímico se celebra cada 15 de junio en conmemoración al nacimiento de Juan Antonio Sánchez, doctor y profesor creador de esta carrera en la Universidad de Buenos Aires (UBA) en 1919.