El trasplante de órganos y tejidos es el único tratamiento posible para algunas enfermedades. Gracias a la donación, en el Hospital Garrahan se llevaron a cabo 111 trasplantes a menores de edad, lo que representa el 78 por ciento del total del país: entre ellos 3 trasplantes cardíacos, 33 hepáticos, 29 renales y 45 de médula ósea.
El Hospital Garrahan realizó el año pasado 111 trasplantes pediátricos, un número que representa el 78 por ciento del total de trasplantes a niños, niñas y adolescentes en nuestro país en 2015 y que sólo es posible gracias a la donación. "Los trasplantes no serían posibles sin ese gran acto de solidaridad que es la donación de órganos, y que sumado al trabajo que hacen los equipos de salud permite salvar la vida de niños y niñas en nuestro país", destacó el titular a cargo del Consejo de Administración, Oscar Trotta.
De esta forma, el Garrahan recordó la importancia de la donación de órganos, en el marco del Día Nacional de la Donación de Órganos y Tejidos. Actualmente, en Argentina la tasa de donantes es de 13,5 por millón de habitantes.
En 2015, y según los datos oficiales del Incucai, 1.773 pacientes recibieron un trasplante de órganos, incluyendo 1.370 con órganos provenientes de donante fallecido y 403 de donante vivo. La tasa de trasplante fue de 41,11 por millón de habitantes. En el caso de los menores de 18 años los trasplantes realizados fueron 142: de esa cifra en el Garrahan se llevaron a cabo 111, es decir el 78 por ciento del total.
De los 111 trasplantes realizados correspondieron a médula ósea, 45; trasplante cardíaco, 3; trasplante pulmonar, 1; trasplante hepático, 33 (4 de donante vivo y 29 de donante cadavérico); trasplante renal, 29 (2 de donante vivo y 27 de donante cadavérico).
Además de los trasplantes de órganos, también se llevaron a cabo 45 implantes, que son posibles gracias a la donación de tejidos: se realizaron 24 implantes cocleares y 17 implantes de oído medio.
El 30 de mayo se celebra el Día del Donante en conmemoración del nacimiento del hijo de la primera paciente que dio a luz después de haber recibido un trasplante hepático en un hospital público, lo que representa la posibilidad de vivir y dar vida después de un trasplante.