Esta mañana el hall de ingreso del Hospital mujeres, hombres, niños y niñas amasaban la mezcla de resaca con tierra húmeda, trabajaban el musgo y elegían plantas con y sin flores. Estaban participando del taller de Kokedama para padres, pacientes y personal del Hospital que se realizó con el fin de generar un espacio de aprendizaje, distracción y contacto con la naturaleza. El taller fue organizado por el Grupo Medicina Integradora y la Oficina Representante del Paciente y dictado por el Garden Club.
Las personas trabajaban el barro hasta dejarlo como una tortilla y luego ya con la planta elegida, la moldeaban en forma de bola. Organizadoras del taller iban recorriendo cada trabajo y dando consejos, llevando musgo donde faltara u opinando sobre qué planta era la adecuada según el fin para el que se quería: "si no tenés luz directa, está muy bien que elijas una suculenta", "esa que no tiene mucha raíz te va a resultar más difícil de cuidar", explicaban.
El taller de Kokedama cambió la mañana para quienes tuvieron que llevar a sus niños al Hospital y pudieron no sólo aprender una nueva técnica para trabajar con plantas si no también llevarse la creación a sus casas. Cada persona que pasó por el taller se fue con uno o dos kokedamas y un instructivo para saber cómo cuidarlas.
Kokedama significa "bola de musgo" y es una técnica artesanal japonesa de cultivo de plantas que tiene más de 500 años de antigüedad e intenta recrear un hábitat natural mediante una maceta viva, esto permite llevar un poco de naturaleza a hogares y jardines de forma ecológica y decorativa. Se pueden producir distintos arbustos, plantas florales y silvestres con sus raíces envueltas en bolas de musgo.